Año 1986, del Cd "Qué tienes en la cama"
LETRA: "Dicen, amiga mía, que el amor es cuestión de poco tiempo; y dicen también que se termina y por eso no hay por qué tomarlo en serio. Ya somos dos, los que pensamos, que el amor es algo más que todo eso; y somos dos, los que soñamos, con la vida por delante, para amarnos cada instante, somos locos que vivimos del amor. Dos locos de la vida, que se aman y se cuidan, llevando una sonrisa y en la mano alguna flor; dos locos de la vida, de los que no se estilan, dos locos del amor, enamorados...Dicen, amiga mía, que el amor es cuestión de un buen momento… "
COMENTARIO: Juan, canta esta composición suya con Mari Trini, quizás para que se vea que el amor del que habla es sobre todo el del matrimonio (“ya somos dos”): “uno con una y para siempre”, “de los que no se estilan”, “dos locos que piensan que eso es el amor”. Es muy saludable, hoy día, donde el amor del matrimonio está tan atacado, que oigamos a Juan que nos recuerda lo que ya todos sabíamos: “ni es de uno con otro; ni de una con otra”; “es para siempre”, “hay que cuidarlo para no perderlo”. Aparecen todos los tópicos actuales: el amor “es cuestión de poco tiempo”, “es cuestión de un buen momento”…Juan habla de un amor que hay que cuidar, estando siempre enamorados, y así dure para siempre. La entrega, por parte de Juan, de una flor a Mari Trini, que no se lo esperaba y que se emociona, es un detalle concreto, que Juan ha querido incluir en la actuación y en la letra, para que nos entre por los ojos como el amor está en los detalles y que, con éstos, hay que cuidarlo para que dure. No tiene desperdicio nada de la letra de esta canción; por eso, os dejo que la oigáis y leáis para encontrar todo lo que Juan nos quiere hacer llegar ¡Una vez más me asombro ante las ideas tan claras que Juan tiene sobre el amor y que, sin rubor, va sacando en sus canciones! ¡Gracias, Juan, por habernos dejado esta “perlita” sobre en que consiste el verdadero amor!
“En un contexto cultural en el que muchas personas consideran el Matrimonio como un contrato temporal que se puede romper, es de vital importancia comprender que el verdadero amor es fiel, don de sí definitivo” Esta fidelidad no es imposible, pues “Cristo consagra el amor de los esposos cristianos y se compromete con ellos”; al contrario, la fidelidad “es el camino para entrar en una caridad cada vez más grande. Así, en la vida cotidiana de pareja y de familia, los esposos aprenden a amar como Cristo ama” (Benedicto XVI a los jóvenes, el 24-III-2010)
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