18/8/10

Juan Pardo (Para empezar a vivir)



“De mis manos se ha caído la esperanza, de las tuyas esa fuerza ya no brota; de tus ojos una lágrima furtiva se desliza lentamente hasta el filo de la boca. Y el silencio que hace daño nos envuelve, y se escapan las palabras que provocan; yo me lanzo por el túnel de tu mente rebotando en sus paredes y tropezando con tus cosas. Voy buscando aquel abrazo que aún me debes, para que reconstruyamos nuestra historia. / Para empezar a vivir, jamás es tarde; pero dejar de sentir no es vivir… ¡es de cobardes!. Quiero empezar otra vez, y otra vez intentarlo y si el camino se acaba ante a ti… ¡no hay que aceptarlo!. Hay que buscar un sendero mejor… ¡y caminarlo! / En mis manos se ha posado la esperanza; y en las tuyas esa fuerza se recobra; en mis ojos una lágrima furtiva, se desliza lentamente hasta el filo de la boca. Si me das aquel abrazo que me debes, ya verás como renace nuestra historia”

Canción del CD "Pasión por la vida". Música y letra HERMOSÍSIMA (ya no sé cómo calificar las canciones de Juan: me faltan adjetivos superlativos). ¡Qué bien está contada esta historia y que bien está resuelta!. No sé si fue así como Juan compuso la canción, pero yo me la imagino como la escena entre dos personas que se han querido (todavía siguen queriéndose) una enfrente a la otra; las dos han perdido la esperanza de seguir amándose: ella, la ha perdido del todo y, por eso, la pena de la pérdida es la lágrima que resbala hasta el filo de su boca; él, quizás más fuerte "de momento" se hace el valiente y no llora, aguanta el tirón, simplemente acepta la situación. La situación dura de reconocer a lo que se ha llegado por no cuidar el amor, se manifiesta al principio con el silencio; sin embargo, como sucede en tantas ocasiones, vienen en seguida los reproches mútuos que provocan, que hacen dañob ("la culpa es tuya porque..."); en esa situación, él espera el abrazo de ella que rompa ese momento difícil y haga renacer de nuevo el amor, con el perdón y la vuelta a empezar, porque como sigue diciendo la letra: siempre es tiempo de volver a empezar el amor si éste se ha enfriado, como parece es el caso; dejar de sentir el amor, es de cobardes, porque el amor no es sólo sentimientos sino entrega a la persona a la que se dice querer: muchas veces la rupturas en el noviazgo o en el matrimonio, vienen de pensar sólo en sentir y no en darse al otro. ¡Qué bonito es lo que sigue!: la esperanza y la valentía, está en empezar de nuevo (recomenzar), en intentarlo de nuevo, en no decir ¡se ha acabado!; y si ese camino parece que termina ahí, en esa situación de "adiós", de eso nada (no hay que aceptarlo), hay que intentarlo de otra modo: buscar otro sendero mejor que el recorrido hasta ese momento (que ya se ve que ha fracasado), que lleve de verdad a enamorarse (de esa misma persona). Cuando de verdad, se pide perdón, se acepta el haberse equivocado y no se rompe sino que se busca el amor, se vuelve a posar la esperanza en sus manos (él) y, en ella, la esperanza que estaba a punto de morir, se recobra; es ahora él, que se había hecho fuerte por no llorar, el que suelta una "lágrima que se desliza lentamente hasta el filo de su boca". Al final se reconcilian y renace de nuevo la historia de amor, cuando se funden en un abrazo de perdón mutuo. ¡Ojalá nadie tenga que llegar nunca a esta situación de querer romper con la otra persona por "falta de sentimientos"; pero si llegase esa situación, en la letra tenemos el remedio: ¡no hay que aceptarlo; habrá que buscar un nuevo sendero hacia ese amor que se ha enfriado, pero nunca bajar los brazos que sería de COBARDES!

No hay comentarios: